Decía yo en abril que:
(…), a fuer de ser paranoico, estoy casi seguro que la farmacéutica talycual presentara a poco tardar una medicación efectiva que dejara esta gripe, por virulenta que sea, a la altura de los molestos episodios anuales de todos conocidos.
Y luego en mayo volví sobre el asunto diciendo que:
(…) hay otra posibilidad; que las farmacéuticas quieran campear la crisis a golpe de alarmismo pandémico.
Si España tiene solo 10.000.000 de antivirales almacenados, ante esta crisis sanitaria, de ser ciertas las predicciones de la OMS, tendrá que comprar por lo menos cinco o diez millones más.
Jugosa factura en Tamipuñetiflus, ¿no?
Pues seguro que más de uno — ¿hay alguien ahí? — levantó la ceja y me tacho de exagerado, cenizo y paranoico.
¿A que sí?
Bueno, pues la semana pasada, cierta farmacéutica anuncio que ya tenía disponible la vacuna para la neogripe, hacheuno o como coño la llamen definitivamente en la actualidad.
Manifestando que estará disponible a gran escala en septiembre o octubre, a tiempo para la campaña anual de vacunación, a un precio de entre quince y treinta euros por unidad.
Muy asequible, ¿verdad? ¿Quien se negaría a pagar treinta euros para evitar la enfermedad del año?
Pues yo, por ejemplo.
Pero a lo que vamos, serán treinta euros pero solo para aquellos que puedan pagarla porque la farmacéutica se ha negado a ceder la vacuna gratuitamente a los países pobres y sin recursos.
En pos de la protección de sus derechos comerciales, claro.
Si no pueden pagarla que se jodan y pasen la gripe.
Los países pobres son, según la Organización Mundial de la Salud, los que llegado el invierno serán donde más probabilidades de epidemia y pandemia se dan.
Una gripe que en el primer, segundo y tercer mundo no pasara de ser una molestia gracias a la abundancia de medicación antigripal paliativa y el sistema sanitario. En el cuarto y sucesivos mundos será otra peste asesina.
Y van…
Pero claro, las medicinas son un negocio y quien puede pagarlas sobrevive — y solo sobrevive porque en la actualidad, las farmacéuticas ya no desarrollan curas, solo tratamientos paliativos, es más rentable que consumas un medicamento mensual de diez euros toda tu vida que una cura definitiva de quinientos una vez en la vida — y los que no tienen dinero para pagar los medicamentos que se jodan y se mueran, que molestan y ensucian el paisaje.
Por supuesto, los ancianitos de los países ricos no tendrán problema para ser inyectados con la vacuna anual contra esta u otras gripes, para luego pasarla como cada año consumiendo los antigripales tan inútiles como rentables.
Porque no se ustedes, pero en los últimos quince años solo he tenido tres veces las gripes, y justo los años que me vacune, en los últimos diez años nunca he enfermado pese a no vacunarme y ser persona de alto riesgo, ¿que curioso verdad?
Primero se vende la jodida vacuna y luego los antigripales.
¿Soy paranoico?, sí, ya, pero también exagere cuando dije lo reseñado al principio.
Piénsenlo ustedes.
Yo no puedo más que señalarles el camino. Yo, por mi parte, lo tengo muy claro, la pandemia gripal hacheuno tan grave y peligrosa, es una simple muestra más de terrorismo informativo ejecutado por los grupos de presión económica.
Es cosa de ELLOS.
Piénsenlo ustedes, solo un ratito.
Y a ver si se atreven a decirme que no es más que una paranoia alocada más.
Jorge Díaz.
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